Callejón de Ricote Calle Peña de Francia, 4, 47011 Valladolid

"Encargué un par de pizzas para recoger, y pensando que tendrían datáfono (no tienen), no llevaba efectivo encima. Me dejaron recoger las pizzas con total naturalidad, y me permitieron ir a pagar otro día. Una atención excepcional, y muy humana. Las pizzas muy buenas además! Iré mas a menudo sin duda :)"

"Cada viernes, nuestro restaurante de pizza de siempre ha sido nuestro refugio de sabor y amistad. Sin embargo, esta semana decidimos aventurarnos en un nuevo lugar, solo para volver con una lección aprendida. Nada puede superar la delicia y la calidez de nuestro rincón pizzero favorito. Esta experiencia solo reafirmó que nuestro restaurante es insustituible, donde la pizza siempre es perfecta y un buen lugar para evadirse"

"Excelente restaurante para comer pizzas artesanas de calidad y de muy diversos, variados y originales sabores que no tienen nada que ver con las habituales que se consumen en otros lugares. Algún ejemplo de sus pizzas (no he logrado subir fotos): de cecina, atún con bacón, bacón con manzana, gulas con ajo o cinco quesos, son una delicia (la de cecina un poco fuerte de sabor y la de cinco quesos, espectacular). Además, tienen otros productos muy buenos como burrito, ensaladas, embutidos, lacón y algún pescado como sardina ahumada, anchoas y boquerones. El servicio es estupendo y cercano por parte de sus propietarios (Ruth y Nacho): muy educados, agradables, cercanos y profesionales. Suelen poner tapa con la consumición. Además, en su local (a pesar de que es un poco pequeño y estrecho), suelen tener en la barra productos a la venta como aceite, algún tipo de conserva y otros similares que van cambiando por otros productos de vez en cuando. Por otra parte, aprovechan la pared más larga del establecimiento como expositor para organizar muestras de pintura o fotografía. Por ello, y la estupenda gente que suele acudir al restaurante, el ambiente es inmejorable. Sólo tienen que mejorar el tiempo de espera por las pizzas: hay que tener un poco de paciencia hasta que sirven, aunque merece mucho la pena. Eso sí, hay que reservar con cierta antelación o si no, es casi imposible coger sitio. Sin duda, un excelente lugar para tomar el vermut o cenar una magnífica pizza. Excelente calidad/precio. Si va algún día, repetirá."

"Una de las mejores pizzas que he comido en mi vida (setas + ajo). Las personas que atienen fueron muy amables y se nota que disfrutan lo que hacen. Es un lugar muy íntimo y la calidad de los alimentos es bastante elevada. ¡Gracias por la salsa de jalapeño!"

"Es la segunda vez que voy y todo está muy rico. Además del el trato que es estupendo. Y el precio muy adecuado. Es muy recomendable. No es muy grande y sólo tiene 3 o 4 mesas pero merece la pena ir y probar la comida. Las sardinas animadas con la tostada y el salmorejo está deliciosa. Y así la mayor parte de las tapas que puedes pedir. La pizza no destaca por ser la más correcta del mundo y puede que incluso la masa no sea maravillosa, pero la mezcla con cecina me parece muy interesante."