TONINO'S

"No nos gusto. Sobre el papel todo parece muy bonito pero según empiezan a sacar los platos,el cuento se les viene abajo. Pizzas y pastas con buena presencia en un primer momento pero ya en boca sin ninguna gracia ni nada especial. La de papada y alcachofas un chiste en sí mismo. El pan de ajo,sin comentarios. El servicio completamente perdido y sin orden ninguno. Para un restaurante italiano,mala relación calidad precio. Por mi parte pueden cerrarlo mañana."

"Si te apetece una buena comida italiana en un ambiente relajado es tu sitio. Para mí lo mejor los fuera de carta que cambian cada mes. Y las locuras de pizzas de postre"

"Nos gustó mucho, platos que cunden y buen sabor Camareras muy majas y atentas en todo momento Rapidez en el servicio sin sentirte apurado, todo lo contrario La única pega que puedo poner, es que que al llegar hacia un calor terrible y el aire estaba súper bajito. Precio para 4 personas ~130€"

"Muy buena opción si estás cerca del centro, no te importa andar y no te apetece comer comida típica de Valladolid. Tienen unos productos muy buenos. La masa de la pizza no es de mi estilo particular, pero está muy rica. Eso sí, la carta es un poco escasa. Lo dicho, buena opción si quieres productos italianos reales."

"Fuimos 2 personas a cenar un sábado de julio con reserva. Pedí mesa dentro ya que no conocía el restaurante y suele hacer más fresquito, haber más espacio y más decoración en el interior que fuera. Estaba equivocada, dentro hacía demasiado calor al estar la cocina en la misma sala separada únicamente por la barra. A esto se le unió que entre mesas de distintos comensales a penas había hueco para pasar si quiera al pequeño baño. Eso sí la decoración dentro está mucho más cuidada. Osea que, pide terraza si reservas en verano. Con respecto a la cena, pedimos el carpaccio de wagyu junto con una ración de pan de ajo. El pan estaba riquísimo, sin embargo la carne de wagyu no tenía a penas sabor. No me gusta el queso por lo que el sabor se me quedaba pobre al no poderlo probar en su conjunto, pero a mi acompañante no le disgusto el plato. Definitivamente yo no lo volvería a pedir. Continuamos con la pizza tartufata que fue claramente un acierto, de las mejores que he probado. De postre pedimos la tarta crujiente de limón que era una especie de milhojas con crema emulsionada de limón. Este postre ligero con sabor suave nos encantó, aunque echamos de menos un toque más de acidez. Por otro lado, aunque el agua es barata se sigue echando de menos que al pedirla te den a elegir entre embotellada o de grifo. Pagamos 46,3€ en total, no es un restaurante barato pero tampoco me pareció excesivo."