Restaurante Molí de Xirles

"El entorno es muy bonito, junto al río, los niños pueden jugar sin peligro. La comida es deliciosa. Tomamos el menú, con ensalada con rulo de cabra y vinagreta de mango con miel y mostaza, pastel de puerros y crujiente de queso con dátiles como entrantes, yo tomé olleta de blat de principal (MARAVILLA!!!) y tarta de queso al horno de postre. También probamos los minchos, todo un descubrimiento. Repetiremos, sin duda."

"Me sorprendió el lugar, el nombre ya te hace pensar en agua pero que tras pasar el verano tan largo te veas rodeado de ese vergel es un punto a su favor. Tiene bastante capacidad en varios ambientes incluyendo una gran terraza para poder disfrutar mejor del entorno y que según la hora y la gente, se escucha hasta el agua que circula al lado. La comida y el servicio bien y los precios también , pero repito para mí el lugar es lo mejor."

"Pedí un chuletón a la brasa. No sólo la calidad de la carne fue nefasta, sino que me la trajeron totalmente cruda, fueron totalmente incapaces de ofrecerme una solución a ello aparte de "puedo sacarte una plancha y te la cocinas tú", después de quemarla por fuera y dejarla cruda por dentro. Me he ido sin comer. No volveré."

"El ambiente es ideal para comer relajado. El servicio, ágil y eficiente. La comida, buena. Recomiendo los arroces, francamente buenos, y todo lo que vaya a la brasa. Precios, muy contenidos."

"El sitio está bastante escondido, pero está muy bien señalizado. Hay aparcamiento privado suficiente como para llenar el restaurante. El servicio es impecable: muy amable y servicial. Están atentos en todo momento. La terraza es peculiar, porque a primera vista parece un lugar bastante rural, pero el inmobiliario y el riachuelo que pasa junto a la terraza lo convierten en un 5 Estrellas. A pesar de estar al aire libre, la terraza está limpia. Y la comida (qué es a lo que hemos venido), espectacular. De primero, hemos optado por una ensalada de cabra para compartir entre 2. Estaba aliñada con salsa a la mostaza y miel. Ha sido una auténtica delicia. (18€) De Segundo, hemos optado por una paella del señoret. Estaba bien hecha, por lo que a los que les gusta el culillo torrado lo disfrutarán muchísimo. (14€/pers.) No hemos podido con los postres, estábamos demasiado llenos, así que hemos finalizado con cafés. Algo tostado para mi gusto, pero bien tirando. Por unos 55€ con un buen vino blanco, hemos podido disfrutar de una comida relajante tanto por el sonido del río, como de la música de ambiente. Por lo que, lo recomiendo."