Bodegas Hijos de Juan Gil 30520 Jumilla, Murcia

"Decepción! Hacía tiempo que tenía en mi lista visitar las Bodegas Juan Gil ya que su fama les precede, pero siento decir que fue una gran decepción. La bodega no tiene nada que envidiar a otras de la zona, incluso en mi opinión creo que es la peor de todas las que hay en Jumilla incluso de productores más pequeños. Comenzando con la visita fue excesivamente numerosa, la guía nos dio una charla de 40 min que se resume en decir lo famosos que son, todo lo que exportan y hablar de que en la cata probaríamos su mejor vino "etiqueta azul" para que posteriormente ni apareciese una botella de este vino en la cata. Sobre la cata les resumo, 4 vinos jóvenes de entre 6 y 12€ que el público puede consumir en un supermercado cualquiera y que no recomendaría a nadie (se salva el etiqueta plata el único aceptable de la cata). Para que se hagan una idea, hablan de los antiguos vinos de jumilla diciendo que en las tabernas se servían con queso para que este disimulara lo malos que eran y justo en la bodega te los sirven con queso para que tu paladar aguante el estrepito de un vino joven como es comoloco."

"Esta mañana visitamos la bodega y degustamos una deliciosa comida maridada con 4 de sus vinos. La bienvenida por las señoritas de la entrada ya anunciaba lo que sería una gran experiencia, La visita guiada con la profesionalidad de Mª Carmen nos deleitó (conocimos con detalle la desconocida y tierna historia familiar así como ciertos secretillos de sus vinos) y todos los platos que nos sirvieron nos sorprendieron notablemente por lo sabrosos y bien elaborados que estaban. En resumen, una gran bodega, gran familia y mejores trabajadores que aman su profesión. Gracias!"

"Nuestra guía fue espectacular y tuvimos la suerte de ver todo el proceso desde el volcado de la uva a el embotellado, con todo detalle en cada explicación. Totalmente recomendable."

"Hicimos una parada en nuestro viaje y decidimos visitar la bodega que tienen en Jumilla. Las visitas hay que hacerlas con cita previa, pero la mujer que nos atendió, Maria, tuvo el detalle de hacernos una visita rápida, muy amena, a nosotros solos, donde nos explicó lo principal y nos enseñó las instalaciones y la bodega, incluso nos dio a probar varios vinos. Muchas gracias, María, por tu gesto y tu simpatía. Volveremos sin duda y haremos esa vista guiada con más calma."

"Excelente bodega y muy buena visita guiada. Da gusto ver la pasión que los hermanos Gil ponen en sus bodegas."