Hotel Mandarín Oriental Ritz Plaza de la Lealtad, 5, Retiro, 28014 Madrid

"Trato exquisito, ambiente relajado y elegante con un pianista magnífico. El afternoon tea merece mucho la pena y tuvieron el detalle de sorprenderme con un pastel de cumpleaños y de tocarme el cumpleaños feliz al piano. Hay que ir una vez en la vida."

"Fantástico hotel, sin duda, aunque un poco caro para mi gusto y para mi bolsillo, jejeje. Comparando con hoteles similares de Madrid creo que los precios deberían de estar en torno a los 450-500 (más IVA) en temporada baja. En cualquier caso la experiencia ha sido fantástica para mi pareja y para mí: hemos estado super a gusto y todos los empleados nos han tratado fenomenal. Creo que éste es el gran patrimonio del hotel: sus empleados; son todos muy amables, educados, simpáticos y eficientes. El Palm Court es un espacio maravilloso y se come muy bien; el bufet del desayuno es excelente. También quiero resaltar lo ecológico que es el hotel: servilletas de tela, botellas de vidrio, tarritos de vidrio para las salsas y para la miel, ausencia de mini envases de gel y de champú en el baño…. Este aspecto es muy importante para nosotros: la política medioambiental. Agradecemos también que sea un hotel dog-friendly, incluso en el Palm Court. En fin, ha sido una experiencia maravillosa pernoctar y comer en el Ritz."

"Estuvimos en el Tea time, el sitio es precioso, la atención es exquisita por parte del personal, la música deliciosa aunque un poco cerca del piano nos sentaron.. y todo lo que nos pusieron riquísimo pero..... muy muy escaso . En ese sentido un poco de decepción. En otras ocasiones antes de la reforma eran más generosos"

"Un hotel de ensueño, cada salón es una nueva experiencia tanto para la vista como la paz que te brinda. Excelente comida y una gran variedad de opciones que te hace falta tiempo para degustar todo. Personal muy profesional y accesible ante cualquier situación. Al final no te quieres ir y dejar ese lugar tan bonito."

"Fui a tomar un café por la mañana, y me encontré con un salón precioso, acogedor y muy luminoso. El personal muy atento, yo diría que en algún caso demasiado. El café son 8€ y te ponen unas pastas pequeñas de té de 2 tipos, las de mantequilla y otras de chocolate. Antes de entrar al salón a mano izquierda si lo necesita están los aseos. El salón fue reformado hace poco. Dispone también de terraza y alguna sala más q sale del salón principal. En una de ellas se encuentra un piano blanco divino y el acceso al ascensor. Lo visité un día de diario por la mañana y estaba poco concurrido."