Casa Rural O Desestres 36885 A Castiñeira, Pontevedra
Descripción
Bienvenidos a Casa Rural O Desestres, una encantadora casa rural con más de 200 años de antigüedad, ubicada en el pintoresco municipio de La Cañiza, en Pontevedra, España. Nuestro establecimiento ha sido cuidadosamente restaurado para conservar su estructura original y decoración típica, ofreciendo a nuestros huéspedes una experiencia auténtica y acogedora.
En el interior de la casa, encontrarán 6 habitaciones dobles, todas ellas con cama de matrimonio y baño privado con ducha. Además, la casa cuenta con una cocina totalmente equipada, un acogedor salón con chimenea y un comedor donde podrán disfrutar de deliciosas comidas caseras.
Pero el verdadero atractivo de Casa Rural O Desestres es su impresionante entorno exterior. Con una finca de 3.000 m2 completamente cerrada, nuestros huéspedes podrán disfrutar de la tranquilidad y la belleza natural que nos rodea. Además, podrán refrescarse en nuestra piscina o disfrutar de una deliciosa comida al aire libre en nuestro asador. También ofrecemos aparcamiento privado para la comodidad de nuestros clientes.
Nuestra ubicación privilegiada nos sitúa a solo 5 minutos del centro urbano de La Cañiza, a 30 minutos de la vibrante ciudad de Vigo y sus hermosas playas, y a tan solo 10 minutos de la frontera con Portugal. Esto nos convierte en el destino perfecto para aquellos que deseen explorar la belleza natural y la rica cultura de Galicia y el norte de Portugal.
En Casa Rural O Desestres, nos esforzamos por ofrecer a nuestros huéspedes una experiencia inolvidable, llena de comodidad, tranquilidad y autenticidad. ¡Esperamos darles la bienvenida muy pronto!
Fotos
Reseñas
"Por tercer año consecutivo pasamos parte de nuestras vacaciones en esta magnífica casa, ideal para los peques (la enorme finca y la piscina son geniales para ellos), pero también para los adultos, ya que el entorno no puede ser más tranquilo, haciendo honor a su nombre. Además, Manolo y Mari son personas muy amables, siempre disponibles y atentos para hacernos la estancia más cómoda. Todo un acierto al que volver."
"Pasamos un fin de semana entre amigos increíble. Los dueños son súper amables, la casa impoluta. Nos asombró lo bien cuidados que estaban todos los detalles. El espacio interior está súper bien distribuido, habitaciones por un lado (¡preciosas todas!no había ninguna 'menos bonita:...), y la cocina-salon como espacio común, por otro. Los exteriores son espectaculares, con una enorme finca, que se puede convertir en un remanso de paz. Puedes estar conviviendo en la casa con gente y ni enterarte de que están, y a la vez, compartir tiempos para comer o charlas en la cocina-salón donde se cabe de sobra y se está muy a gusto. Da mucho juego. Y la verdad que es que el jardín y el entorno, junto a la pisci y la churrasquera, son geniales. De la cocina también cabe destacar positivamente lo bien equipada que estaba, de las mejores que he visto en cuanto a menaje, sartenes, ollas, electrodomésticos. ¡Una maravilla! Un lugar con una ENERGÍA ESPECIAL. Repetiriamos sin dudarlo y esperamos poder hacerlo pronto, en familia o entre amigos. ! GRACIAS POR TODO!"
"Este año hemos vivido una Preciosa noche de San Juan recuperandonos Del mundo, Aquí en plena naturaleza,en un lugar mágico,ideal para encontrar la tranquilidad o para disfrutar de eventos con la familia y amigos, Un maravilloso lugar repleto de momentos inolvidables, nos llevamos la esencia de la buena gente muy respetuosa y con muy buen trato, quedando muy agradecidos por toda la atención que nos mostrasteis y que percibimos, volveremos sin duda alguna, muchas gracias por vuestro cordial trato y amabilidad. 100% Recomendable"
"Me he alojado en esta casa rural del 18 al 20 de junio de 2021 con 11 amig@s y nuestros hijos, todas las personas que comunicamos debidamente a la propietaria. Nos encontramos con una casa algo "incómoda" para ir con niños pequeños o si hay mal tiempo (como fue el caso) porque el salón y la cocina no están conectados directamente con las habitaciones teniendo que salir al exterior y subir bastantes escaleras mojándote. Por otra parte, todos observamos cierto abandono en las instalaciones exteriores como columpios o una sombrilla deteriorados, un futbolín de madera precioso pero estropeado... Así como ciertas deficiencias en el interior para nuestro gusto, que quisimos compartir con la dueña de la casa a través de nuestro amigo Juan Vila, nuestro interlocutor a la hora de hacer la reserva y también para transmitir nuestras sugerencias de mejora, ya que él hablaba en nombre de todo el grupo de amig@s que nos alojamos allí. Al margen de los malentendidos que pudieran existir con la leña o la hora de salida, el modo en que la dueña de la casa O Desestres y sus hijas entraron al salón el domingo tras una conversación con Juan en la planta alta, invadiendo nuestro espacio privado con nuestros niñ@s en plena sobremesa, visiblemente alterada y buscando nuestra complicidad mientras criticaba a nuestro amigo por ser sincero y decirle lo que todos pensábamos de la casa, fue alucinante y muy desagradable. Nos obligaron a desalojar la casa ya que no se marcharon del salón hasta que recogimos y nos fuimos.. Hubiera sido mucho más elegante darnos un rato para terminar la sobremesa y recoger todo, esperando en otra estancia de la casa o incluso volviendo un poco más tarde."
"A ver si no borran este comentario, como hicieron con las otras dos reseñas de personas que se alojaron este fin de semana en la casa. Menos mal que tenemos capturas de imagen. Ante todo agradecer a Manolo su predisposición para solventar el problema de la leña. Creo que se vio envuelto en una mala gestión por parte de su esposa. Somos un grupo que llevamos años yendo de casa rural y las premisas para buscar alojamiento son; que admitan mascotas y tengan barbacoa. No tiene sentido llegar el domingo y protestar porque había un perro, cuando en vuestra página web claramente pone que admitís mascotas. En cuanto a la leña, se avisó de que íbamos a hacer brasas tanto el sábado como el domingo, se nos dijo que no había problema e incluso que había machete para cortar más. Al llegar el viernes, no había leña ni machete, Manolo fue a buscar uno y nos dejó la leña preparada. De saber que no había la habríamos llevado nosotros como hicimos otras veces. En cuanto a la calefacción se pidió porque las mínimas para ese fin de semana eran de 10 grados e íbamos con niños. Una vez llegamos a la casa vimos que era calentita, y le dijimos a Manolo que no hacía falta ponerla. Así que fin del problema. En ningún momento se exigió, tal y como se dice en vuestros comentarios, porque hemos visto las conversaciones. Después de que Manolo nos explicara tema de llaves, funcionamiento de electrodomésticos y demás, le dijimos que saldríamos el domingo a las siete. Sin embargo, sin previo aviso mediante una llamada como se había quedado con ellos, se presentaron allí el matrimonio y dos hijas. Sin llamar ni siquiera a la puerta, entraron los cuatro al salón. Me parece una falta de educación y decoro increíble por parte de los propietarios, pues estábamos aún de sobremesa y en nuestra intimidad. Tuvimos que recoger las cosas con la mujer allí dentro. Lógicamente nos enfadamos y se aprovechó para transmitir "críticas constructivas" que se tomaron de muy pésimas maneras tanto la mujer como las dos hijas, que empezaron a hacer muecas y sonidos. Había una plaga de hormigas en la cocina y no porque dejáramos la comida pues ya estaban el viernes. Entendemos que es una casa de campo pero tanto las hormigas como los insectos secos es tema de higiene y limpieza. Cosa que habéis negado. El lavavajillas tenía estropeado el desagüe. Las toallitas de los baños estaban llenas de humedad y hubo que tirarlas. En la piscina había una sombrilla con la tela totalmente deshecha. Gracias que Manolo nos dejó dos nuevas el viernes. No sé de donde sacáis que nos hemos bañado en la piscina cuando este fin de semana la lluvia dio poca tregua. Fuera del recinto de la piscina había una pila de unas seis tumbonas sucias y llenas de moho. Había habitaciones con olor a humedad y lo habéis negado. Hasta para reservar la casa hubo discrepancias con el precio porque no era como en la web. Que fastidian las críticas sí, pero de ahí a calumniar gratuitamente a alguien hay un gran trecho. Entrar en la cocina llorando y buscando complicidad con nosotros poniendo verde a Juan es de muy mal gusto. Ni hubo regalos, ni hemos podido bañarnos en la piscina, ni se alojó gente no inscrita ni se exigió la calefacción, ni os escribió personalmente ninguna persona alojada este fin de semana."
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