El Sauce Rúa Sinagoga, 8, 15001 A Coruña

"A pesar de ser un sitio con encanto, a día de hoy la limpieza brilla por su ausencia. La comida es aceptable aunque puede que decidan servirte algo diferente a lo que has pedido. El precio es bastante económico, eso sí!"

"A pesar de tener un aspecto rústico y con encanto, la falta de limpieza y el servicio seco y desganado tiran por la borda el darle una nota positiva a este sitio. No puede ser que para 5 raciones, un viernes a la hora de comer, hayamos tenido que esperar más de 2 horas para poder tener todas servidas. Entre la primera ración (que de por sí la carta es algo escasa) y la segunda estuvimos esperando más de 40 minutos... El local es pequeño, apenas 6-7 mesas, así que no entiendo la tardanza en servir. Una lástima pero mi primera y última experiencia en este sitio no es recomendable."

"Restaurante auténtico gallego, muy acogedor y agradable. Imprescindible reservar. Calidad y precio muy bien. Las raciones Croquetas, tortilla, rabas, ensalada… todo muy recomendable y muy sabroso. Platos de cuchara buenísimos, caseros y muy baratos. Los platos principales (solomillo a la manzana y filete relleno) un poco escasos de cantidad. Queso y membrillo casero buenísimo. No muchas opciones para intolerantes al gluten."

"Una antigua taberna en el centro histórico de A Coruña. Nos encantó y sorprendió el codillo. Muy recomendable. El ambiente es agradable y el servicio muy profesional ."

"Un lugar de los de toda la vida. Y qué te vas a encontrar en un sitio así, pues comida de la de toda la vida, casera y muy sabrosa. Nosotros nos decidimos por unas croquetas (con una bechamel ligera y deliciosa), unos calamares fritos (con un rebozado espectacular) y un queso del país como entrantes. De platos principales tortilla con chorizo (al estilo de Betanzos), huevos fritos con chorizo, huevos fritos con jamón, ensalada de la casa, lomo con salsa de manzana (sencillamente riquísimo) y una milanesa de cerdo (también muy rica), de postres un corte de helado (del de toda la vida), unas fresas con zumo de naranja, dos mousse de queso (suave y muy rica) y dos cremas de limón (sabrosas y buenísimas), para terminar cuatro cafés con gotas que acabaron siendo ocho, para beber agua. Todo ello por 92,50 €. Nos sorprendió que en la carta no hubiera pescado, desconozco si en el menú del día que tienen de lunes a viernes lo incluirá en algún plato, pero puedo asegurar que pidas lo que pidas no te equivocarás, está todo buenísimo y muy bien cocinado. El sitio está decorado de manera tradicional, muy acorde con el entorno en el que se encuentra. La atención fue muy buena, con un personal muy amable y sin tener que esperar mucho entre platos, sirviendo a todos los comensales a la vez sin tener que estar esperando unos por los platos de los otros."