A Cofradia de Rinlo Avenida Leopoldo Calvo Sotelo, 2, 27715 Rinlo, Lugo

"La caña!!! El mejor arroz con bogavante que he comido y he comido muchos. El restaurante además con encanto. El Alvariño que nos recomendó el camarero muy bueno. El aparcamiento está difícil, así que hay que llegar con tiempo y ver aquello que merece mucho la pena. Sin duda muyyyyy recomendable y después te vas a ver la playa de las Catedrales. Ea."

"Ha cumplido las expectativas. Comida de 10. Arroz con marisco y bogavante espectacular. Hasta todas las tartas de postre. Eso sí, hay que reservar antes y encargar el arroz."

"La fama le ha llevado a convertirse en un engaño de restaurante. Iluso de mí, cobrando 45€ por un arroz con bogavante (muy generoso de bogavante) no puedes esperar maravillas, aunque siendo la Cofradia de pescadores de un pequeño pueblo pesquero tampoco esperas que el bogavante ni tenga sabor, esté seco y muy probablemente conociera en su día mejor las costas de Canadá que las gallegas. Cortado además con sierra eléctrica (cortes perfectos en la concha que sólo pueden hacerse con el bicho bien "fresco", vamos, congelado) y con cantidad de trozos exactamente iguales en la cazuela. Tres trozos de cola iguales? Dos de la cabeza? Cosas raras. Pero lo peor era que el sabor no existía. Las zamburiñas no eran tal sino vieiras del Pacífico y el erizo del revuelto... de lata, claro. Los calamares no estaban tersos. El que sepa por qué lo digo, pues ya lo sabe. Tengo que decir que la ración de bacalao era generosa de buena calidad además. A mi hija le encantó (el bacalao). Cuando en un restaurante no ves clientes locales, mal asunto generalmente... y en este caso tan sólo estábamos guiris cenando. Gran decepción."

"Como la Fama le precede, teníamos que ir. El arroz caldoso con bogavante, sin ser el mejor que he comido en mi vida, estaba ESPECTACULAR. El comedor muy bonito y muy organizado por los turnos de reserva. El trato del personal, especialmente JOAQUÍN, de diez."

"Estuve hace unos años con mi mujer. Tuvimos que ir previa reserva, si no es bastante difícil dar con una mesa. El local no es pequeño y tiene también mesas fuera. El arroz con bogavante que comimos estaba brutal; el mejor que comí nunca (y bien barato; nos dejaron la perola en la mesa y comimos hasta no poder más). Y el trato fantástico. Muy recomendable, sin duda. Volvería sin pensármelo..."