Bar Restaurante Tauro Carrer de la Pastora, 1, 08191 Rubí, Barcelona

"Bar de barrio sin más. Al menos te ponen alguna tapita con la consumición. Para tomarte una cerveza o un refresco sin más. También es churreria, pero fuimos por la tarde noche y solo tomamos algo."

"Muy buena experiencia,paramos por casualidad para desayunar,veníamos de Francia camino a casa Valencia,los churros (porras ) inmejorables buenísimos y los bocadillos,la atención muy buena por parte de la camarera que nos atendió y nos dejos pasar adentro con nuestro dos perretes,muy buena!! Y el cocinero chapó!! Volveremos cuando estemos por la zona...."

"Un bar donde casi siempre hay gente. Sólo he desayunado aquí: chocolate con porras, y nada mal. Amplio, limpio y con terracita. De precio así, así, nada competitivo con otros bares."

"Hemos ido a desayunar chocolate con churros y están muy buenos. Raciones grandes a precios muy asequibles. Personal muy amable. Lo recomiendo."

"Apertura reciente, el local es amplio y adaptado a sillas de ruedas y está limpio. La decoración, para ser un abr tan nuevo, es bastante noventera y con, a mi juicio, demasiadas máquinas tragaperras. Me da la sensación de que se acabará convirtiendo en el típico bar de barrio (chigre) en poco tiempo. Pero vamos a mi experiencia en el local. Una clienta ha pedido una ración de churros en la mesa. Le sirven porras. La camarera, con un tono bastante seco, le indica que sólo tienen de esos, y que a medida que entre el frío empezarán a hacer de las otras. La clienta no entiende la explicación. La verdad es que yo tampoco. Decide conformarse y comerse las porras sin alargar la situación. Tampoco le queda otra opción... Hago mi pedido. 15 porras para llevar. La clienta traslada el pedido a cocina y el señor que hay dentro le contesta: "¡15€ el quilo de porras!", A lo que la camarera responde que lo que ha pedido a cocina son 15 unidades. Sigo sin entender nada. Mientras se supone que estan haciendo nuevos churros para poderme servir, el señor de la cocina sale a barra y delante mío y sin venir a cuento le dice literalmente "ESPABILA, QUE ERES MUY LENTA". La chica responde: "¿Cómo?" Dando claramente a entender que no le ha oido bien, y el señor le responde: "QUE ESPABILES". En ese momento entiendo todo. El señor debe ser el dueño, aparentemente el trato a sus empleados, no debe ser el mejor del mundo y seguramente están ahí desmotivados y en un entorno agrio. No los justifico, porque eso nunca debe trasladarse al cliente en forma de atencion justa o mala, pero sí tengo claro que no voy a volver allí. No quiero dejar mi dinero en un lugar donde el dueño trata así a sus empleados. Nota para el dueño: SE CORRIGE EN PRIVADO Y SE FELICITA EN PÚBLICO. A eso se le llama educación, cosa que usted no ha tenido esta mañana no con sus empleados ni conmigo como cliente. Si le estoy dando dos estrellas, es por el mérito de los empleados que aún aguantan esos desplantes en público. Por cierto: precio de mi pedido; 12.30€, 15 unidades. No se si es caro o barato, no compro churros habitualmente. Juzgad vosotr@s mism@s."