Caprabo

"Hoy he empezado algo mal el día. La primera ocurrencia, desobedeciendo a las indicaciones de mi médico, ha sido ir al Caprabo y comprar una botella de whisky. La botella estaba en una estantería protegida por una pequeña barandilla. He supuesto que era para que no se cayeran los preciados licores. Pero he cogido mi whisky sin ningún problema. Al ir a pagar, la advertencia de la cajera: “esto tenías que habérmelo pedido a mí”. Y sí, tenía razón: había dos letreritos. Pero yo, que tengo la vista (y otras muchas cosas más) cansada, no los he leído… Cada día pasan, ante mis ojos, cientos de letreros cuya lectura pospongo casi siempre. Luego, pago con tarjeta; con mi móvil. Cuando detecto (por el sonido del datáfono) que ha sido aceptada, me voy. Pero la cajera me advierte de nuevo: “¡Un momento!”. Y me paro, quieto y plantado como un palo en el asfalto. Y sí, la cajera tenía, nuevamente, toda la razón del mundo. Porque tenía que comprobar que el pago se había hecho correctamente. Finalmente, ha salido el ticket por la impresora. El ticket confirma el pago. El sonido del datáfono, no. El sonido de mi móvil, menos. Pero lo que no me ha gustado es el tono. Ese tonito me recuerda a un sargento de la mili. Tenía muy malas pulgas. Y me hablaba con el mismo tono que la cajera. Hay muchas maneras de decir las cosas. Y las de la cajera, no me han gustado nada. Por lo demás correcto. Otro día iré al Mercadona. Sus cajeras y sus cajeros sonríen con cierta frecuencia. Y si algún día meto la pata en algo, siento una complicidad amigable por su parte y me ayudan sin meterme la bronca delante de todos."

"Buenos productos y personal amable y atento. Bien ubicado, con fácil aparcamiento"

"Buen supermercado, muchísima variedad de productos, no es muy grande pero está muy limpio y ordenado. Fácil aparcamiento delante y en calles que lo rodean. Con servicio a domicilio. El personal muy amable y servicial."

"RATAS. me faltaban 5 céntimos para una bolsa. UNA BOLSA! (que cuestan 15centimos). He tenido que volver a casa con la compra en la mano. Por ratas no vuelvo."

"Me encanta el personal y los productos. No tengo ninguna queja al respecto. Cada persona del equipo del Eroski es simpática y te dan tratos agradables"