Hotel Mirador

"En un puntuación del 0 a 10 para el personal, un 10 !!!, son gente muy acogedora, atenta y amable. El entorno es precioso y único para desconectar, se respira alta montaña pura. Hay numerosas excursiones para hacer, también desde el mismo hotel te facilitan las mismas. En cuanto a este tema, habría que mejorar que los usuarios de los hoteles, etc, tuvieran acceso más allá de la barrera de Cap de Rec; si no es muy difícil hacer la excursión "dels estanys de la pera" . Nos hospedamos en las habitaciones de la parte nueva y por la diferencia de precio y desconociendo como son las de la parte antigua, nos gustaron. En cuanto al almuerzo, todo muy correcto. En cuanto a la cena y la comida, siendo un restaurante de montaña, encontramos a faltar algo hecho en la brasa. También como área de mejora, la carta de vinos y cavas un poco escueta en cuanto a variedad. La valoración global es sin lugar a dudas positiva y recomendable. Si tenemos ocasión de volver por la zona, seguro escogemos estas instalaciones."

"Toda mi infancia en este hotel. 40 años de referencia familiar. Hotel familiar, buena comida, tranquilidad, naturaleza, actividades mil, buen lugar para desconectar y muy buen servicio."

"Pequeña joya en medio de la Cerdanya. El alojamiento está muy bien cuidado y el personal es súper atento. Ramon es muy agradable y siempre está dispuesto a ayudar. La comida del restaurante vale la pena probarla. Además tiene cargadores para coches eléctricos"

"Desde que descubrimos este hotel hace 26 años, repetimos siempre que podemos, Ramón y Belén son atentos y encantadores ,en constantes mejoras y adaptándolo a la sostenibilidad ecológica."

"La habitación en sí está bastante bien. Buenas vistas y muy amplia. El hotel es poco sostenible, hacía tantísima calor que tuvimos que abrir la ventana por petición de recepción... Solo estuvimos 2 noches, pero no nos hicieron la habitación, normalmente en los hoteles hacen la cama cada día. Los desayunos estaban correctos, aunque la segunda mañana no pudimos disfrutar de croassants, no quedaban, pero a la pareja que llegó a última hora les ofrecieron unos que tenian guardados. Es un detalle tonto que esa pareja agradecería pero que nosotros al verlo no nos pareció tan bien, a nuestra niña le hubiera gustado comerse un croassant. Las cenas estaban muy bien, pero tardaban demasiado. Por último, se agradece y mucho que podamos ir con nuestra familia peluda, los perretes, pero me parecería un detallazo que después de cobrar 9€ por noche dejaran al menos un bebedero en la habitación. En general estuvimos bien, pero no repetiremos."