IES Legio VII Plaza Santo Martino, 6, 24003 León

"después de 6 años en este centro me veo capacitada para valorarlo de la manera más positiva posible. El Legio, no sólo gracias a sus profesores y alumnos sino también gracias a todo el personal no docente, es una segunda casa para todo aquel que pase por sus aulas. si me lo preguntaran, no dudaría un segundo en recomendar este centro a todo alumno que quiera disfrutar de la educación pública desde el primer curso de la ESO. Finalizado segundo de Bachillerato, me siento muy agradecida de haber contado con los excelentes profesores que me han acompañado por el camino en esta etapa, profesionales que nos han hecho amar cada una de sus respectivas especialidades así como contagiarnos un interés general por el aprender. No solo yo, sino que estoy convencida de que todos mis compañeros, estamos de acuerdo en que el Legio, es el mejor instituto de todo leon."

"Estuve 2 años en este instituto y fue suficiente para cambiarme de instituto. Los profesores excepto 4 contados, parecía que no eras persona para ellos. En 2° de la ESO iba con problemas de base en matemáticas y aún pidiendo ayuda o cualquier cosa pasaban de mi. Además tenía ataques de ansiedad por culpa de la de estrés que nos metían. Lo único bueno que puedo decir es que cuando tenía ataques serios de ansiedad sí me trataban bien y me ayudaban hasta encontrarme mejor."

"Pongo una estrella porque si no me deja publicar la reseña. Sin duda, la peor decisión que hemos tomado como padres, fue elegir este instituto para que nuestro hijo hiciera el bachillerato. Una experiencia nefasta. Guiados por la fama del nivel educativo, y puesto que nuestro hijo tenía muy buena nota media en la ESO, escogimos este instituto pensando que era lo mejor. Nada mas lejos de la realidad. No tratan a los alumnos como personas sino como números, lo único que les importa son las estadísticas de la EBAU. Para ellos solo existen los alumnos de Sobresaliente, del resto ni se preocupan. Nuestro hijo en 2º, bajó el rendimiento y no nos ayudaron en nada, ni se preocuparon por él, lo dicho, para ellos sólo era un NÚMERO, que no estaba dando los resultados esperados. Cuando fuimos a hablar con ellos solo recibimos desprecio hacia nuestro hijo, obviando tanto el director, como parte de los profesores la labor pedagógica que se les presupone. A pesar de la nula colaboración del centro, nuestro hijo, con nuestra ayuda, se volcó en el estudio y logró sacar el curso menos 1 asignatura. Historia de España. Con la nueva Ley se puede titular con una asignatura suspensa cumpliendo los requisitos. A pesar de que nuestro hijo, cumplía con creces todos, el director y profesor de historia en ese momento, se negó a darle el titulo, argumentando, con un desprecio que no puedo explicar, que no cumplía los objetivos y que era lo mejor para él. Eso ha supuesto, que haya tenido que repetir solo con una asignatura, lo que le ha provocado acabar con sus sueños, con sus esperanzas y lo peor, crearle una desmotivación y una baja autoestima. Por eso quiero dar las "GRACIAS" a los responsables del centro que han conseguido que un chico con una nota media de la ESO de 8.5 y de 1º de bachillerato de 7, se haya sentido sin apoyo y haya perdido el interés, la motivación y el afán de superación. Y DECIAN QUE ERA LO MEJOR PARA ÉL. Un año después se ha demostrado que se equivocaban. Todos los profesores de secundaria a los que hemos consultado, nos han dicho que lo que le han hecho a nuestro hijo es una barbaridad. Espero que el instituto rectifique para que no le vuelva a pasar a nadie. Desde el primer momento se les dijo a los alumnos que nadie iba a titular con una asignatura suspensa, lo cual me hace pensar que esa decisión tiene una marcado sesgo ideológico. Se tomo la decisión con carácter general y no se estudió cada caso, les dio igual los antecedentes académicos de cada alumno. Por supuesto nuestro segundo hijo no va a ir a Legio VII. No se lo recomendamos a nadie."

"Los peores años de mi vida, fatal trato por gran parte del profesorado y administración. Pésima organización, nadie sabe nada de absolutamente nada, aunque tenga buena fama lo único vque haces es sufrir, solo es chapar para vomitar en el examen, no aprendes NADA."

"La calidad de un centro educativo se define por sus alumnos y alumnas y aquí ha habido muchos de cinco estrellas. Cito algunos ejemplos: Laura Glez. Llamas, Mónica Pavón, Sara Estefan, Marta de la Vega o Irene Martínez entre las chicas; Andriey Seoane, Gabriel Presa, César o Miguel Bermejo, entre los chicos."