La Casa de los Membrillos Carraduero, 6, 47329 Villabáñez, Valladolid

"vengo a poner mi opinión sincera, la casa en si estaba bien, era una casa espaciosa, pero ni vale el precio que se cobra, ni parece una casa rural, si no una casa cualquiera en la que está constantemente viviendo gente, tiene demasiados defectos pequeños que hacen que al final no sea una estancia completamente placentera, son defectos que por separado no serían de gran importancia pero al ser muchos lo notas, las baldosas del suelo estaban la mayoría despegadas y al pisar se movían, la mesa del porche estaba rota y no se podía mover hacia ningún lado porque se desmontaba, de tres habitaciones una no tenía aire acondicionado y daba el son todo el día en la ventana, el armario de la habitación pequeña estaba roto y no podías dejar que se cerrara la puerta, en esa misma habitación la persiana si la bajabas no subía, después constantemente se iba la luz aunq no hubiera gran cantidad de cosas enchufadas, mínimo 2 veces al día se iba la luz, los perros del vecino ladran mucho de noche Y HAY UN GALLO QUE CANTA POR LAS NOCHES Y POR LA MAÑANA. sinceramente no estaba tan mal pero no vale el precio que se cobra 1,300€ por 10 días en esa casa es excesivo"

"Hemos ido a dos cumpleaños y los niños han disfrutado un montón viendo los animales, ordeñando y haciendo juegos de agua. Un sitio muy chulo y diferente"

"Las chicas son encantadoras. Celebramos el cumpleaños de la niña allí y se lo pasaron muy bien: vieron animales, les dieron de comer, cogieron los pollitos, los huevos, hasta el gatito recién nacido. Montaron en poni, plantaron tomates y we lo llevaron a casa. Una tarde muy entretenida, con merienda y todo!!"

"Fuimos un poco a la aventura, sin saber lo que nos ibamos a encontrar...y fue todo un acierto. Fuimos a celebrar un cumpleaños con niñ@s de entre 8 a 10, con alguno más pequeño y se lo pasaron en grande, tuvieron tiempo para todo, para dar de comer a los animales, ordeñar una cabra, recoger huevos, jugar al futbol, merendar...hasta plantaron tomates, que luego cada uno se llevo el suyo para casa. Pasaron una tarde increible con unas monitoras estupendas que se desviven por los niños y que hicieron que no tuvieramos hijos durante 4 horas, se paso la tarde volando en un ambiente natural y al aire libre. Totalmente recomendable y repetiremos con el pequeño seguro."