Atlántico Calle Padre Cueto, 27, 35008 Las Palmas de Gran Canaria, Las Palmas

"Pésimo servicio , aparte que es muy caro y no cumplen con el servicio ofrecido el dueño es un xenófobo , racista y explotador que tiene a extranjeros trabajando por un misero sueldo. Yo personalmente no contribuiría a que este tipo de empresas se sigan haciendo ricos gracias al trabajo mal pagado de otras personas . Por otra parte cuentan con maquinaria antigua que no cumplen su verdadera función , ojalá cierren este negocio porque es una verdadera estafa ."

"0 recomendado, un trato horrible a los clientes, deciden mentir diciendo que tienen las prendas listas cuando claramente no las tienen, el dueño un señor muy desagradable por sus malas actitudes y expresiones ( sobre todo sus gestos queríendo dar a entender que te vayas) y mas aún por sus comentarios despectivos y racistas la verdad que un muy mal sitio no lo recomiendo para nada y por desgracia para mi les pongo 1 estrella por qué no puedo poner ninguna. Pero enserio no sigan dando trabajo ni su dinero a gente tan mala que trata tan despectivamente a sus clientes con sus comentarios racistas y su forma de querer echarte con sus gestos sin decirlo"

"En verdad quiero poner 0 estrellas pero desgraciadamente y afortunadamente para ustedes no se puede. Son pocos profesionales( me hicieron esperar 1 mes y no hicieron nada ) y gritan a los clientes , además son mentirosos (me mintieron dos veces ), decir de que tenían una chaqueta termina y resulta ser que era mentira cuando fui a recogerlo también quiero recalcar que nos echaron haciendo un gesto con las manos como si quisiese que nos fuéramos rápido sin decir nada. La verdad que muy muy mala."

"Muy recomendado. Contactamos con ellos para la limpieza de una alfombra Kilim de colores muy claros que del uso estaba ya muy sucia. Nos ofrecieron servicio a domicilio, que nos pareció muy cómodo, vinieron a buscarla a casa y la trajeron cuando estuvo lista. La alfombra quedó como nueva y el precio nos pareció muy razonable."

"Tuve la mala suerte de que lleve mi edredón que era súper colorido y no se que productos le echaron que me lo descolorieron completamente. El empleo intentó hacerme creer que yo lo había llevado ya descolorido a la tienda, tras intentar en varias ocasiones hablar con el jefe, que nunca dio la cara. Me dieron una pequeña indemnización."