Bar El Abanico Calle Bami, 12, 41013 Sevilla

"Qué poquísimas ganas de volver…!!! Tortillitas aceitosas y blandengues; se equivocan con el montaito de lomo y me lo ponen de pollo; no saben abrir una botella de tinto; te cobran 50 ridículos céntimos por “servicio de mesa”; tardan una eternidad en servir… Uuuffff… Vine de “urgencia” porque estábamos en “Urgencias”, pero la próxima vez (ojalá no sea necesario) no entro aquí. Así que no quiero volver ni a “Urgencias” ni a este bar…"

"Estuve un Domingo a mediodía, el servicio fue pésimo, la comida pésima, pedi dos tapas una de ensaladilla para ir picando mientras me venía la segunda de taquitos de rosada fritos que me sirvieron con mucho retraso y cuando llegó estaba frita sin descongelar totalmente, la ensaladilla la tuve que reclamar 2 veces, el camarero lo único que hacía era disculparse diciendo que la cocina estaba atascada, no lo entiendo ya que tampoco había tanta gente. Mientras yo estuve al menos vi quejarse a dos mesas más del pésimo servicio y levantarse a otras 2 mesas para irse ya que no les atendían."

"Autoservicio, las tapas estaban bien, pero es cierto que muy pocos camareros, tardaban para atenderte. Las patatas bravas eran otras precogenladas. Por lo demás lugar correcto."

"Situado junto al hospital Virgen del Rocío, debe ser un lugar bastante frecuentado por funcionarios sanitarios y familiares de enfermos. El trato, como no podía ser de otra forma, fue maravilloso. Se preocupan por el cliente. Por estar donde está el ambiente no es el mejor, aunque quizá sea más el subconsciente de relacionarlo con el centro hospitalario. En cuanto a la comida, las papas bravas picaban bastante, algo muy destacable, puesto que hay algunos establecimientos en los que no pican y eso no tiene sentido, el pisto, que no debe picar nada, lo hacía en exceso, incomible desafortunadamente, y la carrillada espectacular de sabor y textura, se deshacía en la boca, lo cual se agradece. Mi hijo no se quejó con las lagrimitas de pollo. Volveremos a pesar de las valoraciones contradictorias, puesto que los responsables del establecimiento nos hicieron saber que se preocupan por su clientela."

"A pesar de ser el típico bar de barrio, las tapas no sólo son baratas sino de buena calidad y muy buenas. Está cerca del hospital así que fuimos allí a comer algo y nos sorprendió para bien. Lo malo, como en casi todos los bares de Sevilla, es que sólo tienen Cruzcampo..."