Restaurante Victoria Diseminado R 38, 61, 29014 Málaga

"Pésimo lugar para comer. Calamares fritos extra aceitosos y con un rebozado malísimo. Pollo a la plancha en mal estado. Servicio lento y malo. Lugar sucio y lleno de gatos que merodean. Crees que es una venta de toda la vida pero deja mucho que desear. No volveremos jamás. Publicidad engañosa, no tienen menú. Relación calidad precio, extracaro. Ni gratis volvería a ese lugar."

"Pone menú 12€ pero no es cierto. En un viaje de trabajo hicimos una parada que no repetiremos. La camarera se nos ha inventado un menú improvisado en el que los primeros a elegir eran sopa de picadillo o sopa de marisco y los segundos son filete de pollo o filete de cerdo y encima le dijo al jefe muy segura de su gran idea “te improviso un menú. Autorizado, ¿no?. Risas. El cartel de 12€ de la puerta es publicidad engañosa. Al final me he pedido un flamenquín por lo mismo que me costaba el menú a priori y bebida y café aparte, claro. No lo recomiendo. La cerveza es cruzcampo."

"Muy bien la comida,, el gazpacho normal, el pescaíto variado bien hecho y sabroso, el flan se notaba casero por qué pesaba bastante, local muy limpio, el servicio rápido y atentos, volveremos, gracias"

"Lo primero es no hacer mucho caso al nombre porque más que restaurante es una venta de carretera y no muy conservada. Paramos porque íbamos en ruta, es accesible y tiene facilidad de aparcamiento. Hay salones interiores y también terraza en la que poder estar con tus mascotas aunque al estar ubicada en los montes y a pie de autovía hace bastante aire. La comida está bien aunque nada especial. Pedimos solomillo de cerdo a la brasa que tenía sal por encima pero estaba soso en el interior. Bastante seco. La morcilla y el chorizo muy rico aunque la morcilla un pelín por encima el precio. Te cobran el pan sin que lo ponga en la carta. El arroz con leche muy sabroso, dulce y rico. El servicio es muy lento. La camarera que nos atendió muy agradable pero lentos a más no poder. El señor de la barra lo contrario. Salió a atender a una familia y la sorpresa es que les puso el mantel de papel de una mesa de al lado donde había estado otra familia y que a los 30 minutos decidieron meterse en interior. Resumiendo, bien para salir del paso, sin lujos."

"Es una venta de carretera de toda la vida donde se come comida típica de la zona. El trato muy agradable, buena comida y bien de precio"