Cafetería Casa Don Isidoro

"La atención del camarero, penosa... No se dignó ni a limpiar nuestra mesa, agradecidos que retiró el vaso. Era nuestra primera vez y la intención del camarero es que fuera la última. Lo ha conseguido. Ni un buenas noches nos merecíamos."

"Los botellines más fríos de la zona sin duda, el camarero muy simpático y atento"

"Bar con una buena terraza para tomarse unas cervecitas junto a algunas de sus tapas. Atención agradable y eficiente"

"Comidas típicas de toda la vida, muchas cosas de fritura. En la terraza se está agusto. En general el servicio es rápido y muy amable."

"Un desastre. Hoy martes, a las 21.30 h hemos acudido diez personas por reserva. Recomendé el sitio para una celebración aunque la última vez que vine estuvo "reguleras", porque la vez anterior la atención fue sobresaliente (una chica que no he vuelto a ver). Me han hecho quedar un poco mal. La atención ha sido amable y al final, nos han invitado a un chupito. Poco más positivo puedo decir hoy, desgraciadamente. Al llegar, hemos tenido que avisar varias veces para pedir las bebidas. El resto de la noche ha sido la misma tónica: Tener que estar atentos y avisar insistentemente para pedir. Viendo la dificultad para que se nos prestara atención y la tardanza, poco antes de las diez pedimos la comida. El camarero sabe indicar las cantidades para tapas, pero para medias y raciones (que luego nos enteramos de que eran lo mismo) no sabía decir... ni acudía a cocina a preguntar tampoco. A los tres cuartos de hora comienza a venir la comida. De las cinco cosas que pedimos, dos no vinieron en la cantidad pedida. Una de las rondas de tortillitas de camarones vino casi cruda, incomible. Tuvimos que pedir que la pasaran un poco más. Las croquetas de rabo de toro, venían la mitad con el centro frío. En tres ocasiones nos trajeron platos que no eran nuestros. En lugar de adobo, nos pusieron merluza frita (o algo así). Pedimos que nos lo cambiasen y tardaron tanto, que se nos pasó el hambre. Comentamos que ya no nos lo pusieran, pero nos dijeron "que ya estaba ahí"... ya estaba ahí pero tardó otros casi quince minutos. Nos comimos parte ya que lo había traído, pero una ración casi entera se quedó sin tocar. El pan no era del día y estoy casi seguro, que ni de ayer. 20 euros por persona con el hambre quitada, hartos de esperar, numerosos fallos... Una lástima porque la primera vez que vine nada más abrir, puse cinco estrellas. La segunda vez, bajé a tres estrellas por varias cosas. Esta vez, la tercera, como se suele decir ha sido la definitiva. Normalmente trato de dar varias oportunidades antes de poner una reseña negativa: esta vez, es inevitable."